La geotermia sigue siendo nuestra tecnología favorita. No hay duda.
Igual les pasa a los usuarios de instalaciones con bomba de calor geotérmica para climatización y agua caliente en viviendas. Para llegar a disfrutar de una instalación altamente confortable y, habiéndose planteado otras opciones que podrían servir a sus necesidades, al final se han decidido por esta tecnología a pesar de que requiere una inversión inicial superior a la del resto de sistemas. Y la disfrutan.
La decisión por la geotermia como solución para las instalaciones domésticas suele responder a una serie de condicionantes que apuntan a este tipo de energía como la idónea en determinados casos. Esos condicionantes se traducen, a su vez, en ventajas y motivo de orgullo para el usuario.
Para entenderlo hay que recordar brevemente qué es la energía geotérmica aplicada a la climatización y al agua caliente en edificación.
¿Qué es la geotermia aplicada a la climatización?
La geotermia como la capacidad de mantener una temperatura constante en el subsuelo independientemente de las condiciones existentes en el exterior, aplicada a las instalaciones en edificios, consiste en aprovechar dicha energía constante mediante el uso de bomba de calor geotérmica, para climatizar (refrigerar en verano y calefactar en invierno) y producir agua caliente sanitaria todo el año. ¿Cómo se consigue? El principio es bastante simple: lo que hace el sistema es transferir el calor del edificio al subsuelo en verano y transferir el calor del terreno al edificio en invierno.
A partir de este principio tan sencillo el diseño de la instalación requiere, no solo conocer las condiciones climatológicas del lugar, tipología, envolvente del edificio y demás condicionantes al uso, sino que también debemos recabar los datos de comportamiento térmico del terreno (test de respuesta térmica), que nos permita optimizar el cálculo de la instalación y conseguir minimizar el consumo energético ofreciendo el máximo confort al usuario.
¿De qué presumen los usuarios con instalación de bomba de calor geotérmica? Las ventajas de la geotermia.
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Funcionamiento y rendimiento estable todo el año, las 24 horas al día.
La bomba de calor geotérmica funciona indistintamente en cualquier época del año y a cualquier hora, no dependiendo ni de las condiciones climatológicas exteriores ni de si es de día o de noche. La razón ya la hemos expuesto: nuestro medio de intercambio térmico, el terreno, a partir de cierta profundidad mantiene una temperatura estable y constante.
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Alta eficiencia, bajo consumo, rentabilidad económica en la vida útil de la instalación.
Las bombas de calor geotérmicas poseen la tecnología más eficiente. Con un consumo de energía muy bajo se reduce notablemente la factura y se obtiene un alto confort térmico.
El rendimiento de las bombas de calor se mide mediante la relación entre la potencia térmica conseguida y la potencia eléctrica consumida; que en calefacción se conoce con un parámetro llamado COP y en refrigeración con uno llamado EER.
En climatización por geotermia, los rendimientos para calor suelen ser superiores a 4 (COP>4), lo que significa que con 1 kW de potencia de consumo el sistema te aporta 4 kW térmicos (potencia calorífica); igualmente con bomba de calor geotérmica, los rendimientos para refrigeración en verano pueden estar por encima de 5 (EER>5), o sea con 1 kW de potencia de generación tendremos 5 kW térmicos (potencia frigorífica).
La eficiencia en climatización también está muy ligada a la forma que se elige de acondicionar: suelo radiante para calefacción y fancoils para refrigeración son los idóneos para sacar el máximo partido a la bomba de calor geotérmica. En este caso confort y eficiencia se dan la mano.
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Cubierta libre.
Esta instalación no ocupa espacio alguno en la cubierta del edificio. Esto es altamente favorable en muchos casos en los que no es posible usar la cubierta por algún motivo.
Puede ser un requerimiento urbanístico, tratarse de zonas de especial protección del patrimonio histórico-arquitectónico donde no se permiten instalaciones vistas;
Puede ser que la superficie de cubierta esté ocupada por otras instalaciones o infraestructuras;
Incluso puede responder al deseo expreso del usuario de destinar la cubierta a zona habitable, de recreo, solárium, barbacoa…;
En cualquier caso, si la cubierta se diseña como no transitable, con la geotermia se evita la necesidad de hacerla accesible para mantenimiento de esta instalación en concreto, lo cual es una ventaja respecto a los sistemas de energía solar térmica.
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Tres en uno: Frío en verano, calor en invierno, agua caliente todo el año.
Instalación integral y automatizada: todas las necesidades térmicas de la vivienda se resuelven con una única bomba de calor.
La instalación para la bomba de calor requiere un único espacio interior donde albergar la propia bomba y los depósitos de agua para los sistemas de clima y para el agua caliente sanitaria. Una única instalación para cubrir todas las demandas del edificio.
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Instalación limpia, silenciosa y segura.
La bomba de calor geotérmica es una energía renovable que no necesita quemar combustibles, no produce humos ni gases y por tanto no contribuye al aumento del calentamiento global ni a la emisión de gases de efecto invernadero.
Es silenciosa y su uso es altamente seguro y fiable; aunque en España esté empezando a ser conocida ahora, es una tecnología probada y muy avanzada tecnológicamente gracias a su alta implantación desde hace décadas en países de centro y Norte Europa, en Estados Unidos, Estados Unidos, etc.
El coste de mantenimiento es demostradamente menor que en la mayoría de instalaciones de agua, lo cual le aporta un plus de comodidad al usuario.
Por último, esta instalación es fácilmente combinable e hibridable con otras tecnologías e instalaciones renovables, dando lugar a una mejora exponencial de sus bondades.
Ejemplos que ya conocemos: uno de ellos es la hibridación geotermia-solar fotovoltaica, gracias a la cual se puede conseguir una notable disminución de la factura de electricidad al cubrir con energía solar buena parte de la demanda de electricidad de la bomba de calor; otro ejemplo es la hibridación geotermia-solar térmica, altamente recomendable para casos en los que hay una importante demanda de calor (o agua caliente) durante todo el año.
De esta última y de otras opciones interesantes os iremos informando en próximos artículos y, poco a poco, vamos sumando adeptos a esta tecnología de la que los usuarios son, insisto, los que más presumen.